Por La Mafia en el Poder
Al nombrar al empresario Alfonso Romo como su jefe de Proyecto de Nación para 2018, en caso de que gane la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador está aceptando la asesoría del ex presidente Carlos Salinas de Gortari.
La razón es que el empresario regiomontano es muy amigo del jefe de La Mafia en el Poder, con el que no sólo lo une una estrecha amistad, sino que le consulta muchas cosas, incluso el plan para El Peje.
No son versiones recogidas en los pasillos de la polaca, sino declaraciones públicas hechas recientemente por el propio Romo a los periódicos El Universal y La Jornada, respectivamente.
El coordinador del Proyecto de Nación de Morena no es nuevo en eso de financiar campañas presidenciales: ayudó con recursos a que Salinas de Gortari llegara a Los Pinos; después lo hizo con Ernesto Zedillo y repitió con Vicente Fox.
O sea, Romo ha sido siempre un empresario muy pegado al poder, que le ha retribuido con creces sus contribuciones a las campañas electorales.
Ahora se hace cargo del proyecto de López Obrador, quien habla maravillas del empresario regiomontano, a pesar de sus vínculos con el jefe de La Mafia en el Poder.
El Peje tendría que explicar una serie de contradicciones que hay al hacer jefe de su proyecto presidencial a un empresario que fue favorecido por el Fobaproa y que admite pedirle consejos a Salinas de Gortari.
Sí, a ese al que el tabasqueño asegura odiar y al que culpa de no haberlo dejado llegar al poder en dos ocasiones.
O sea, qué contrasentido tan grande es que Andrés Manuel encargue desarrollar el proyecto de Morena para 2018 a un amigo íntimo de su peor enemigo.
Porque en la entrevista con El Universal, a la pregunta de si se sigue llevando con Salinas de Gortari, el empresario contesta: “Claro que me llevo muy bien con él”.
Aclara que las diferencias que puedan traer el tabasqueño y el ex presidente son cosa de ellos dos y que él no se mete.
Pero lo que sí dejó en claro es que no descarta consultar al jefe de la Mafia en el Poder para armar el Proyecto de Nación de Morena, y que difiere con el tabasqueño acerca de su postura sobre las reformas Energética y Educativa.
O sea, cómo puede confiar El Peje su proyecto a alguien que no está de acuerdo en su visión educativa y energética, y que es muy amigo de su peor enemigo.
¿Será que el proyecto de Morena va a ser neoliberal?
Financiero también de Fox
El empresario Alfonso Romo no sólo financió la campaña de Salinas de Gortari ni participó en la de Ernesto Zedillo; fue uno de los financieros del panista Vicente Fox, otro de los enemigos de Andrés Manuel.
Incluso el empresario regio lejos de negarlo, lo presume: “¿Qué hice con Fox cuando lo apoyé por un cambio en el país? ¿Qué le pedí, qué me dio? Nada. Me retiré. No soy panista; nunca lo he sido”.
¿Pero qué tal con Salinas de Gortari?
Dice que con él sí hizo cosas positivas porque lo llevó a Chiapas y se metió a los negocios del campo.
¿Y los negocios que le ofrecerá el tabasqueño a cambio de su financiamiento, si esta vez llegara a Los Pinos? Porque ya lo financió antes y no pudo recuperar su dinero.
Y para lograrlo está dispuesto a sentarse hasta con el diablo, sin importar si a El Peje le guste o no, pues advierte que se va a escuchar a todos lo que tengan buenas ideas, llámense Salinas, Ernesto Zedillo, Cuauhtémoc Cárdenas o como se llamen.
Beneficiario del Fobaproa
Todo mundo tiene muy presente que una de las principales banderas de López Obrador en contra de los gobiernos priístas fue el Fobaproa, ese “robo a la Nación” mediante el cual el gobierno federal utilizó dinero de los mexicanos para salvar de la quiebra a los banqueros.
Al menos eso repitió durante años y muchos mexicanos le compraron el discurso.
Uno de los principales beneficiados del Fobaproa fue el empresario Ángel Rodríguez, quien tomó de Salinas de Gortari el grupo Asemex-Banpaís, al cual se le inyectaron 400 millones de dólares de las arcas públicas.
Luego de malgastar el dinero y de huir del país por malos manejos, el gobierno de Zedillo vendió la aseguradora Asemex en alrededor de cien millones de dólares. O sea, le metió 400 y la vendió en 100; esa fue una de las principales operaciones financieras del gobierno.
El empresario beneficiado por esa venta fue precisamente Romo, a quien en ese tiempo López Obrador tildó de ladrón y aprovechado del pueblo.
Hoy ese ladrón es el Jefe del Proyecto de Nación de López Obrador… ese el López Obrador.
*El Irreverente publica de lunes a viernes.
