Con la salida de Édgar Amador de la Secretaría de Finanzas del Gobierno de la CDMX, el PRD cierra la pinza para lo que será parte fundamental de su estrategia rumbo a las elecciones del primero de julio.
Y es que, aunque la salida de Amador estaba más que cantada —incluso se aseguraba que no llegaría a cargar los peregrinos en diciembre pasado—, este movimiento se complementa con el que se dio la semana pasada en la administración capitalina.
Aunque pasó casi desapercibido el enroque ordenado por José Ramón Amieva, jefe de Gobierno de la capital, la llegada de Alejandro Piña a la Secretaría de Desarrollo Social fue el primer mensaje claro de que los amarillos acomodaban sus piezas.
Y conste que Alejandro es un chavo técnicamente preparado y con amplia experiencia administrativa y legislativa, pues, a pesar de su juventud, ha sido delegado en Venustiano Carranza, diputado local y funcionario en la Secretaría de Desarrollo Económico.
Sí, pero da la casualidad que, aunque algunos opinen lo contrario, es muchacho de Julio César El Nenuco Moreno, quien lo formó y lo integró a su tribu, por lo que es claro que sigue respondiendo al exlíder de la Cámara de Diputados.
El nombramiento de Piña, aunado a la renuncia de Amador a Finanzas, le permite a Amieva ceder esa vital área, que maneja todos los recursos y nóminas del Gobierno de la CDMX, casi seguro a Miguel Ángel Vásquez, emanado de las tribus amarillas.
Aunque este personaje nació en la IDN de René Bejarano, desde que inició la actual administración decidió jalar con Vanguardia Progresista, vinculada al hoy exgobernante Miguel Ángel Mancera.
Y no se necesita ser adivinos para entender que si Finanzas y Desarrollo Social están en manos de las tribus perredistas, los recursos gubernamentales —incluyendo los jugosos programas sociales— estarán al servicio de una causa en las próximas elecciones.
Claro que esa causa no será la de Morena y éste no es un asunto menor, ya que al final puede ser la diferencia entre ganar o perder, sobre todo ante lo cerrada que se prevé la contienda capitalina.
Tampoco es que los morenos se tengan que victimizar por una acción de este tipo, pues cuando fueron gobierno hicieron exactamente lo mismo que hoy les van a hacer, y no sólo no lo reprobaron, sino que lo institucionalizaron.
El movimiento en el Gobierno de la CDMX pinta a todas luces estratégico, sobre todo para los integrantes de la alianza Por la CDMX al Frente, pues los diputados del PRD, PAN y Movimiento Ciudadano llenaron de dinero a Desarrollo Social en el Presupuesto 2018.
Entonces el secretario era Amieva, hoy jefe de Gobierno; el problema era que Amador siempre fue un dique para las tribus a la hora de abrir la llave de los recursos. Hoy, muy probablemente con Vásquez, el dinero fluirá a borbotones para lo que se requiera.
Y por mucho que se sientan muy seguros de ganar, los morenos deben estar en verdad preocupados por lo que se juega en la elección.
CENTAVITOS… Por cierto, cómo está eso de que Alfredo El Camarón Hernández Raigosa está invitando por Whats, a nombre del MESI (Movimiento de Equidad Social de Izquierda), a sumarse a los candidatos de Morena. Cierto que El Camarón se salió del coctel amarillo y se fue al pejismo, pero, ¿él es el dueño del MESI? Porque, hasta donde se sabe, ese grupo se formó con su expareja Dione Anguiano y, como en los divorcios, si estaban juntos por bienes mancomunados, pues les tocaría mitad y mitad, ¿o no?
http://www.excelsior.com.mx/opinion/adrian-rueda/afina-prd-su-maquinaria-territorial/1234965
