Vaya que caló, y hondo, el anuncio del delegado priista Fernando Mercado Guaida de que no votará por el candidato de su partido en la CDMX, y que lo hará por la morenista Claudia Sheinbaum.
Más rápido que a Javier Duarte o Roberto Borge, presos por peculado, corrupción y otras lindezas, la dirigencia del PRI en la capital inició el proceso de expulsión de su jefe delegacional en Magdalena Contreras, por presuntas violaciones a los estatutos del partido.
Según la dirigencia local, la fracción IV del artículo 63 de los estatutos del tricolor estipula la pérdida de militancia a quien “apoye públicamente o realice labores de proselitismo a favor de un candidato de otro partido político, salvo en el caso de coaliciones o alianzas”.
Pues si no encuentran otra cosa mejor, los dirigentes se podrían tragar sus amenazas, ya que en ningún momento Mercado Guaida llama a votar por Morena ni por Sheinbaum. Por el contrario, tres veces repite que apoya al PRI y a sus candidatos a alcalde y diputados.
En una declaración al programa radiofónico de Ciro Gómez Leyva el martes pasado, el jefe delegacional deja en claro que él, a título personal, votará por Claudia para la Jefatura de Gobierno porque difiere de las posiciones de su candidato en la CDMX, Mikel Arriola.
No es la primera vez que Fernando critica las ideas del abanderado tricolor, con cuyos postulados no coincide, pero aclara que él es priista y se mantiene en el partido, además de que apoya a los otros contendientes del tricolor.
Si el PRI insiste en expulsarlo, lo único que conseguirá hacer de él es un mártir; primero, porque no se está yendo; segundo, porque quedará la idea de que lo quisieron callar por atreverse a criticar al interior, y tercero, porque probablemente el Tribunal Electoral impida su expulsión.
¿O cómo va a justificar el PRI que en México no hay libertad para votar por quien se quiera y pretenda castigar a uno de sus militantes por ejercer su derecho constitucional?
Desde el interior de su partido han dejado ver una amenaza hacia los integrantes de su equipo que también son candidatos a diversas posiciones, pero si el tricolor hiciera efectivas esas amenazas, además de perder votos, podría causar una protesta en cadena.
Y es que Mercado Guaida no es el único priista inconforme con las decisiones de su dirigencia en la CDMX, a la que no le preocupa lo que pase con sus cuadros después de la elección, pues sólo se ocupa de que le sumen votos a la campaña federal y ya.
El delegado en Magdalena Contreras tuvo el valor de hacer lo que muchos otros querían: reclamar a su dirigencia los atropellos a sus militantes de la capital. No se atrevieron por miedo a perder lo poco que tienen en la canasta de candidaturas.
Aunque no se va a Morena, si lo atacan lo pueden convertir en una especie de agente libre y él y su equipo bien pudieran serle útil a Sheinbaum, en caso de ganar.
CENTAVITOS… Los candidatos de Morena a alcaldes y diputados por la CDMX fueron convocados ayer por la mañana en un hotel de la colonia Roma para afinar la estrategia de la defensa del voto el próximo 1 de julio e ir viendo la logística para los cierres en las delegaciones. Ahí también fueron informados que los boletos para el magno festival del 27 de junio en el Estadio Azteca, encabezado por ya saben quién, están agotados y que decidieron meter gente en toda la explanada, a fin de mostrar músculo. La junta la encabezó Andy, por cierto.
http://www.excelsior.com.mx/opinion/adrian-rueda/cala-en-el-pri-rebeldia-de-su-delegado/1246956
