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Goool… pe de Estado

México ha sido de los pocos países de Latinoamérica que ha vivido un periodo de estabilidad constitucional desde hace un siglo.

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Por Jorge Samuel del Villar

Perú, 9; El Salvador, 8; Ecuador, 8; Chile, 7; Venezuela, 7; Argentina, 6; Colombia, 3; Honduras, 3; Bolivia, 3; México, 0. No hablo de goles, sino de golpes de Estado, del período que abarca de 1921 a la fecha.

México vivió una sangrienta revolución en donde se calcula que alrededor del 15% de la población pudo haber muerto, no sólo por causas de armas de fuego sino por todas aquellas vinculadas con un quebranto al orden administrativo, como insuficiencia de alimentos y de seguridad social; una época trágica, pues se mataron integrantes de las mismas familias debido a que pensaban diferente.

Quizás de ahí surge en México una muy profunda vocación pacifista, de fama internacional. Valoramos mucho nuestra estabilidad social. Al principio, tenemos una actitud muy revolucionaria e insurgente, pero al final tendemos a pensar más con la cabeza y menos con el estómago.

Bueno, hasta Diego Rivera, quien promulgaba el comunismo, la libertad sexual y el ateísmo, aseveró que nunca pisaría una iglesia; al final, le salió la tía Chonita que todo mexicano tenemos dentro y entró a la iglesia a entregarse al Sacramento del Matrimonio.

México ha sido de los pocos países de Latinoamérica que ha vivido un periodo de estabilidad constitucional desde hace un siglo. También, México tiene los mayores índices de desarrollo en Latinoamérica. Los únicos dos países latinoamericanos que pertenecen a la OCDE son Chile y México. Mientras que México es la 15a economía más grande del mundo; Chile es la 44a. En otras palabras, la inestabilidad socio-política del resto de países latinoamericanos no les ha servido mucho, por el contrario, los ha atrasado.

El manejo de las emociones no sólo es fundamental para los individuos, sino también para las naciones. Los individuos tenemos muchas maneras de manejar aquello que tenemos dentro. El manejo de la ira y de la frustración es fundamental para poder desarrollarnos de manera adecuada. Es por ello que en la Reforma Educativa, así como en las naciones más desarrolladas, el manejo de las emociones ya es parte de la currícula académica.

incorrecto manejo emocional puede llevar a cometer homicidios o suicidios. Pero toda emoción también puede ser transformada para nuestro propio beneficio.

Al igual que en el resto de Latinoamérica, ha habido momentos muy ríspidos en la historia mexicana de los siglos XX y XXI. Los bandazos ideológicos mezclados con el uso de las armas en la mayoría de los países latinoamericanos los han hecho retroceder; mientras, en México por más enojo que tengamos no hemos permitido que la ira nos gobierne.

Durante varias décadas del siglo XX, México coqueteó con la Unión Soviética, a causa de un sentimiento de insatisfacción social. Pero al final, la razón prevaleció y nuestro destino no fue tan desastroso como el de decenas de naciones que vieron a sus poblaciones literalmente morir de hambre a causa de desabasto o a críticos del sistema ser ejecutados.

Pareciera que en México estamos repitiendo nuestro patrón histórico. Hay ira, gran parte de ella, justificada. Desafiamos hasta el límite; amenazamos en las encuestas con votar por Morena, verbalizamos todo lo negativo con respecto a nuestros gobernantes. Pero, al final, al momento de votar no arriesgamos nuestras libertades más fundamentales como la de sentirnos seguros al conocer a totales desconocidos a través de sitios virtuales como Bumble oTinder, lo cual sería impensable en la mayoría de los países que conforman el orbe. La gran mayoría de jóvenes mexicanos de más escasos recursos cuentan con un teléfono inteligente con acceso a Internet.

Lo nuestro es la #política en la #CDMX; si en verdad te late la grilla chilanga en las redes, visita nuestra página: https://elinfluyente.mx

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