Alberto Cuenca
@cuenquita
El pasado viernes 25 de mayo, a las 14:00 horas, peritos de la Procuraduría de Justicia capitalina se presentaron en el Instituto de Transparencia de la Ciudad, el InfoDF, para tomar evidencia de la actuación de los ex comisionados Luis Fernando Sánchez Nava y David Mondragón Centeno, que decidieron “retomar” sus cargos a pesar de que por mandato de ley concluyeron funciones el 31 de marzo.
Los peritos se presentaron con la directora de Asuntos Jurídicos del Instituto, Alejandra Mendoza, y el secretario técnico, Rodrigo Montoya, quienes los condujeron al área de las oficinas de comisionados. Ahí tomaron fotos de las oficinas, las cuales estaban cerradas, pero hace unos días los dos ex comisionados que “regresaron” rompieron los sellos, con los que estaban resguardadas las que eran sus oficinas, y se metieron.
Luego de que Sánchez Nava y Mondragón Centeno decidieron reasumir funciones, la única comisionada cuyo periodo sigue vigente por ley, Elsa Bibiana Peralta, anunció que presentaría una denuncia penal, al considerar que sus ex compañeros usurpaban funciones y utilizaban instalaciones públicas sin ser ya servidores públicos.
Antes del 31 de marzo, en la ALDF debieron aprobarse los nombramientos de los nuevos comisionados, pero en vez de cumplir con esa responsabilidad desde el órgano legislativo se ha contribuido a acrecentar la incertidumbre en el InfoDF, que hoy raya en la ilegalidad.
Y es que los ex comisionados Sánchez Nava y Mondragón Centeno no decidieron regresar a sus cargos por iniciativa propia, lo hicieron azuzados por una opinión jurídica sin carácter vinculante emitida por el presidente de la Comisión de Gobierno de la ALDF, Leonel Luna, quien al interpretar el régimen transitorio de la Ley de Transparencia local, planteó que los comisionados salientes podían permanecer en sus cargos en tanto el órgano legislativo nombrara a los sustitutos, lo que por cierto no tiene para cuándo.
El diputado Luna emitió esa opinión a título personal, sin que el documento fuera un acuerdo aprobado por el Pleno de la Asamblea Legislativa, pero los ex comisionados se escudaron en ella para llegar a lo que fueron sus oficinas, romper sellos y actuar como si allanaran una propiedad.
En medio de la crisis, de la que él mismo es partícipe, Leonel Luna ha gestionado una reunión esta semana con la comisionada Elsa Bibiana y los ex comisionados Sánchez Nava y Mondragón Centeno. Si el encuentro resulta exitoso, el diputado Luna ganaría tiempo y así podría capotear las presiones y críticas de legisladores de oposición, del propio INAI y de organizaciones no gubernamentales, por la omisión de no designar nuevos comisionados.
Dentro del propio InfoDF nos comentan que la apuesta del diputado Luna es convencer a Elsa Bibiana para que desista de la acción penal por usurpación de funciones, lo que permitiría a los dos ex comisionados ingresar sin problemas a las oficinas y laborar como si nada ocurriera. En un escenario así la intención es que incluso pudiera sesionar de nuevo el Pleno del Instituto local, pues al menos para la foto ya habría tres de cinco comisionados. Para convencer a Elsa Bibiana, el diputado Luna tendría que ofrecerle la presidencia del InfoDF, algo que ella ha deseado desde que llegó al Instituto.
Lamentable sería esa salida, porque solo acumularía señalamientos de ilegalidad a un de por sí deteriorado Instituto. En vez de resolver la crisis del organismo por un acuerdo entre Luna, comisionada y ex comisionados, los diputados tendrían que convocar a extraordinario y hacer la designación conforme a la ley, pero ha trascendido que Leonel está buscando el apoyo de los coordinadores Jorge Romero, del PAN, e Israel Betanzos, del PRI, para que regresen los ex comisionados.
Leonel Luna pasa por alto que se ha violentado el procedimiento legal para nombrar nuevos comisionados casi desde el principio que se lanzó la convocatoria, en diciembre de 2017, cuando solo dieron cuatro horas para inscripción de aspirantes; luego, cuando volvieron a abrir la convocatoria para que se inscribieran más mujeres, y al final no dictaminaron, lo que nos pone en la situación actual.
