Lorena Osornio
En los gobiernos no se puede aplicar el principio general del Derecho que dice que lo accesorio corre la suerte de lo principal. En campaña tal vez le funciono a la actual jefa de gobierno decir el mismo discurso del ahora titular del Ejecutivo Federal respecto a temas como el combate a la corrupción, la austeridad y esos temas que son muy fáciles de platicar, pero le faltó conocer de primera mano las verdaderas necesidades de la mayoría de los citadinos que hacemos nuestro día en las calles y no detrás de un escritorio.
Gobernar a priori, sin una planeación sistemática y abusando de la popularidad y aceptación con la que goza hasta el momento el Presidente de la República, ha dado píe a que la CDMX se cuelgue de los reflectores de la agenda pública nacional para no entrarle a los temas de la ciudad.
Llevamos más de un mes del gobierno actual, y aún no sabemos las estrategias que se implementarán, si es que las hay, para el tema de la inseguridad como principal problema de la ciudad. De los tantos diagnósticos que han hecho y que pretender seguir haciendo, ya saben donde son las zonas conflictivas, las calles donde hay asaltos a plena luz del día, donde se concentra el robo a casa-habitación y la única acción que hemos visto por parte de la jefa de gobierno en un tema de delincuencia es la custodia de las gasolineras por el del desabasto.
Otros dos temas trascendentales para la Ciudad es la reconstrucción y la movilidad. Los damnificados por el sismo del 2017 no pueden esperar a que se aplique una nueva ley, pues a más de un año aún hay personas viviendo el albergues o parques públicos, a ellos no se les puede decir “permítame tantito en lo que me acomodo en la silla”.
Creímos que al ganar MORENA se iban a terminar las manifestaciones, pero no es así. Antes eran ellos los que se manifestaban, ahora se manifiestan en su contra y los únicos que sufrimos las consecuencias somos los que sostenemos la Ciudad. Es prioritario reglamentar las manifestaciones, tanto tienen ellos derechos de manifestarse como nosotros de llegar a tiempo al trabajo o a la escuela y para eso es necesario un gobierno que nos escuche a todos por igual y no solo por la clientela política.
Desde este espacio le pido al gobierno capitalino que empecemos a conformar nuestra propia agenda, empezando a delimitar las facultades y prioridades en lo local y que realmente se empiece a notar el cambio de la Cuarta Transformación que tanto nos vendieron por más doce años.
