Por La Mafia en el Poder
Los saldos de la contingencia ambiental que se presentó durante prácticamente toda la semana pasada no son para nada tranquilizantes por varias razones.
Una es que a pesar de sacar de circulación a millón y medio de autos cada día, la contaminación no cedió, lo que obliga a la pregunta de si en realidad son los vehículos donde las autoridades deben apretar para mejorar la calidad del aire que respiramos, o si habría que voltear a ver con más detenimiento otros generadores de precursores de ozono como las industrias, comercios y servicios.
Pero lo que preocupa más, es que con la reactivación de la Fase I a 17 horas de haberse levantado, las autoridades hicieron evidente lo que investigadores y sociedad civil han reclamado desde hace años: la completa descoordinación entre las dependencias encargadas del control y combate a la contaminación atmosférica.
Resulta que la Comisión Ambiental de la Megalópolis, que depende del Gobierno federal, levantó la contingencia el domingo, sin importarle que la app ‘Aire CDMX’ de la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad, advirtiera, durante todo el día, que para el lunes habría muy mala calidad de aire y pronóstico de contingencia.
Y ni modo que la CAMe diga que no le compartieron la información, pues cualquiera que tenga la aplicación sabía que ayer subiría de nuevo la contaminación y que era muy probable la contingencia ambiental.
En la Sedema de Tanya Müller prefirieron quedarse calladitos, al cabo que ellos sólo aportan los datos y es la CAMe quien toma las decisiones.
Ahora sí que para qué tanto esfuerzo en desarrollar la aplicación, si quienes deben aprovecharla, nomás no le hacen caso.
Mejor que no deje legado…
El jefe de Gobierno anda muy atrevido diciendo que el legado de su administración no será la Constitución de la Ciudad, sino la gestión en el manejo de residuos sólidos urbanos.
La puntada se la aventó cuando relanzó el proyecto para la captura de biogás en el Bordo Poniente y con el cual se generará energía eléctrica suficiente para cubrir el alumbrado público de la Capital.
Lo que no quiso aclarar, o de plano no le explicaron, es que hace cinco años, cuando se otorgó el título de concesión, la reserva de biogás se estimaba en siete años.
Y ya encarrerado, dijo que el próximo año se podría comenzar a recibir esa energía proveniente del Bordo Poniente, pero nunca le dijeron que no saldrá de la captura del gas metano que emiten 70 millones de toneladas de basura enterradas, sino de una hidroeléctrica en Necaxa.
Catafixian residuos urbanos por residuos peligrosos
Y ahora, con la planta de termovalorización, con la que darán tratamiento térmico a miles de toneladas diarias de desechos, grupos ambientalistas saltaron inmediatamente y amenazaron con buscar la vía legal para detenerla, pues les preocupan las emisiones de gases tóxicos a la atmósfera.
Sin embargo, parece que el gran problema con esta planta no será la contaminación del aire, sino que el resultado de dar tratamiento térmico a 4 mil 500 toneladas de desechos serán 135 toneladas diarias de residuos peligrosos.
Y como tendrán que enviarlos hasta Nuevo León para su manejo y confinamiento, pues evidentemente no habrá salidas diarias por el costo económico que tendría, por lo que se almacenarán temporalmente hasta juntar suficientes toneladas para después enviarlas hasta el norte.
Así que el Bordo Poniente pasará de relleno sanitario de residuos sólidos, a ser el mayor generador de residuos peligrosos de manejo especial.
*El Irreverente publica de lunes a viernes.
