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Capital Político

Prenden luces rojas en Cuajimalpa

No queda claro el actuar de las autoridades capitalinas sobre el ejercicio de 473 mdp.

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La intención que la semana pasada anunció el diputado Leonel Luna para exigir al gobierno el cumplimiento de las obras de mitigación del Tren Interurbano México-Toluca en dos delegaciones de la capital, tiene más fondo del que se le quiere ver.

Por supuesto que es correcto que Luna exija el cumplimiento de compromisos, pero son 20 colonias las afectadas y no todas están en Álvaro Obregón, donde domina; la mayoría corresponden a Cuajimalpa.

Y aguas, porque si no queda suficientemente claro el actuar de las autoridades capitalinas sobre el ejercicio de 473 millones de pesos, esto podría ocasionar otro enfrentamiento con vecinos, e incluso entre el propio Luna y su colega de PRI, Adrián Ruvalcaba.

Porque los dos son los líderes políticos y probables candidatos en sus respectivas delegaciones, y ante la cercanía del inicio oficial del año electoral nadie quisiera ver que el gobierno capitalino dé preferencia a alguno de los dos.

En primera instancia, habría que preguntar cuáles son los criterios que utiliza las Secretaría de Obras y Servicios de la Ciudad de México para decidir en qué gastar los millones de pesos que hay en el fondo para mitigar afectaciones de la obra.

Porque según el secretario Edgar Tungüí Rodríguez, en el polígono de las 20 colonias de las delegaciones Álvaro Obregón y Cuajimalpa afectadas por la obra, se necesitan deportivos, áreas verdes, gimnasios, escuelas, centros sociales y mercados.

Y, por supuesto que en la zona se necesita todo esto, pero las autoridades no han preguntado a los vecinos qué prioridades tienen, porque hay un asunto vital que el gobierno no ha tomado en cuenta: el probable colapso de la zona.

Lo que en realidad urge es invertir en infraestructura para agua potable y, sobre todo, para garantizar la movilidad, pues el tren interurbano detonará la inversión inmobiliaria y, sobre todo, Cuajimalpa quedará sediento y ahorcado.

Por lo pronto, el Consejo Ciudadano de Cuajimalpa ya envió una carta a Miguel Ángel Mancera, con copia al secretario Tungüí y a Leonel Luna para que antes de que inicie cualquier obra tomen en cuenta la opinión vecinal.

Los vecinos recuerdan que cuando Mancera llegó al gobierno de la capital su eslogan fue: “Decidamos juntos”, dirigido a los vecinos de la Ciudad de México, y esperan que siga en pie.

Si la construcción del tren interurbano afectará la vida de los habitantes de 20 colonias, es muy riesgoso tomar decisiones unilaterales sin hacer las respectivas consultas.

Ya se ha visto que la inconformidad vecinal ha parado obras y para nadie sería conveniente que hubiera un nuevo enfrentamiento, porque a los habitantes del lugar les preocupa que los desarrolladores vayan a edificar torres de hasta 30 pisos donde hoy hay casas.

Porque dicen que ya tienen los permisos, y si eso es cierto y son legales no se podrá impedir que construyan. Por eso quieren que el gobierno tome medidas para evitar el caos.

Igual y sería oportuno revivir algunos proyectos en materia de movilidad, sobre todo, ahora que hay recursos, y lo que hoy se percibe como un conflicto, cambiarlo por una buena acción.

CENTAVITOS… Contraproducente será el ejercicio patito de revocación de mandato que el PRD realizó ayer contra el moreno Ricardo Monreal en la Cuauhtémoc, pues su resultado no es vinculante ni tendrá credibilidad porque no lo hizo el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF). Es sólo una bandera política y lo único que los perredistas hicieron fue darle reflectores a Monreal para hacerse la víctima y sacarle jugo, porque para eso pocos le ganan.

http://www.excelsior.com.mx/opinion/adrian-rueda/2017/06/19/1170603

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