Al pedir que el Instituto Electoral del DF organice una consulta para evaluar su gobierno en la delegación Cuauhtémoc, lo que en realidad busca Ricardo Monreal es un posicionamiento público que haga difícil a Morena negarle la candidatura a la CDMX.
Y es que luego del creciente activismo de Claudia Sheinbaum, que cada vez hace más apariciones públicas fuera de la delegación Tlalpan, queda claro que el dueño de los morenos se inclinará por ella para que sea la abanderada del partido en 2018.
Morena elegirá a su representante por encuesta, pero hasta hace poco se tenía la intención de que fueran tres: una al interior del partido, otra abierta a la ciudadanía y una más entre “líderes de opinión”.
Ante esa perspectiva, la jugada de Monreal es más que clara: ubicarse en la cima para que las encuestas lo favorezcan o, en caso contrario, declararse víctima y poner en aprietos a la dirigencia nacional del partido para que explique por qué no sería el candidato.
Pero la intención del zacatecano va más allá de Morena, pues una evaluación, de la que nadie duda saldrá muy bien librado, le dará un posicionamiento mediático que podría ser atractivo para otros partidos, incluyendo al propio PRD, al PAN… o a ambos.
Todos apuestan doble contra sencillo que luego del ejercicio que haga el IEDF, y que seguramente saldrá positivo, el delegado pedirá licencia definitiva para separarse del cargo y emprender una campaña por el gobierno de la capital.
Las razones por las que la mayoría piensa que le irá muy bien en la consulta son por los amarres que ha estado haciendo con grupos perredistas y con el gobierno capitalino, pero además porque le está metiendo una millonada en obras a la delegación.
Dejará el cargo para iniciar campaña aprovechando el vuelo de la consulta, pero al mismo tiempo para no arriesgarse al desgaste de gobierno.
A cambio de que no busque la candidatura al gobierno de la CDMX, Andrés Manuel López Obrador le ha ofrecido integrarlo a su campaña presidencial y hacerlo secretario de Gobernación en caso de ganar, idea que no entusiasma mucho a Monreal.
Por esa razón es que está buscando su propio camino abriendo alternativas que serían ser designado por Morena; en caso contrario buscar el apoyo del PRD; si no, del PAN y tratar de que ambos se unan e integren a otros partidos chiquitos en una coalición.
Y si ni eso le da resultado, pues ya tiene su asociación civil para lanzarse como candidato independiente, que sería su plan “Z”. Pero de que su nombre va a estar en las boletas de la CDMX el año entrante, nadie lo duda.
Por eso, para él es vital que el IEDF le resuelva a la brevedad su petición de “rendición de cuentas” ante los habitantes de la Cuauhtémoc, que será la plataforma en la que se apoyará para lanzarse a su aventura electoral en 2108.
CENTAVITOS… No hubo sorpresa en la designación de Miguel Ángel Mancera como presidente de la Conago, lo que sí sorprendió fue su discurso de aceptación del cargo. Habló ya no como aspirante a la Presidencia de la República, sino como casi mandatario en funciones al exponer una larga agenda económica, política y de seguridad nacional, pasando por el TLC, el mando policial y los migrantes, tarea que ya está haciendo el presidente Enrique Peña Nieto. Con toda esa agenda, ¿le dará tiempo al jefe de Gobierno de atender también a la CDMX?, ojalá que sí.
http://www.excelsior.com.mx/opinion/adrian-rueda/2017/05/04/1161416
