Ante la falta de acuerdos y de confianza en lo que tiene a la mano, Miguel Ángel Mancera evalúa la posibilidad de que sea un externo quien llegue en noviembre a cerrar su administración hasta 2018.
Mucho se ha dicho que al interior de su gabinete la responsabilidad caería en el consejero jurídico, Manuel Granados, o en el secretario de Desarrollo Social, José Ramón Amieva, pero hay muchas dudas al respecto.
Dicen que la opción que más atrae a Mancera es la de Granados, pero que al interior de su primer círculo los celos que despierta esa posibilidad podrían dificultar su llegada, aunque sigue siendo la más firme.
El año próximo será eminentemente político y, de su baraja, el consejero jurídico es el que más tablas tiene en el tema, pues, como quiera, ya fue diputado y líder de la Asamblea Legislativa del DF, donde tuvo oportunidad de tejer redes.
Además, tiene muy buena comunicación con el gobierno federal y eso es muy importante. Y quizá como agregado tenga que es el más leal de los que suenan.
Su plan b es Amieva, quien también ha sido su colaborador cercano y logró hacer buena relación con dirigentes incluso de la oposición, debido al gran presupuesto social que maneja. Es uno de sus principales consejeros, pero la gran duda son sus orígenes.
El titular de Desarrollo Social inició su carrera al lado de Alejandro Encinas, quien no se ha portado muy agradecido con Mancera que digamos, y que abiertamente está coqueteando con Andrés Manuel López Obrador.
Hay que recordar que si Encinas fue no solamente constituyente sino presidente de la asamblea que dio origen a la Constitución Política de la CDMX, fue por decisión del jefe de Gobierno, y que en el Zócalo piensan que no ha sido agradecido.
Fue de los primeros que se pronunció en contra de un Frente Amplio como lo propone Mancera y que ha recomendado ir con López Obrador, no con el jefe de Gobierno, por lo que muchos piensan que si Amieva es el elegido, se podría pintar de moreno.
Y, por si no fuera suficiente, más de uno ha escuchado que si bien la secretaria de Gobierno, Patricia Mercado, ha dicho que la descarten como candidata para la CDMX en el 18, nada ha dicho sobre quedarse hasta diciembre del año entrante.
O sea que aspira a ser quien cierre la actual administración, lo cual no es poca cosa y eso ha prendido las alarmas entre los manceristas, lo que tiene muy tenso el ambiente al interior.
Lo único seguro es que Mercado se quedará al frente unas semanas a partir de que su jefe se separe definitivamente del cargo a principios de octubre, pero no más.
Ante esa situación, Mancera no ha descartado la llegada de alguien de afuera para que lo sustituya y, con ello, acabe con la fuerte pugna interna que ya se está haciendo insostenible en su administración.
CENTAVITOS… Y, hablando del gobierno capitalino, aunque se prevé que los ajustes al gabinete se den luego del 17 de septiembre —V Informe de Gobierno de Mancera—, el que se irá antes es Héctor Serrano, secretario de Movilidad. Parece que el operador político del jefe de Gobierno no quiere que lo metan en el mismo costal de los cambios de la pelusa y se quiere ir el 30 de este mes. Tan existe esa posibilidad que ya hasta se habla de que Carlos Meneses, su hombre de confianza, se está preparando para quedarse en su lugar a partir de septiembre.
http://www.excelsior.com.mx/opinion/adrian-rueda/2017/08/09/1180480
