A partir de la próxima administración las actuales delegaciones se transformarán en alcaldías, figura que contempla la nueva Constitución de la Ciudad de México, y con la que habrá cambios en la obtención de sus recursos, en su organización y en la manera de elegir a los representantes a través de la votación.
El diputado local, José Alfonso Suárez Del Real y Aguilera, quien fue el coordinador del Grupo de Trabajo encargado de la elaboración de la Ley Constitucional de Alcaldías, dijo que el principal cambio será que el gobierno pasará de ser delegado a colegiado.
Afirmó que el gobierno unipersonal de los jefes delegacionales se transformará en un colegiado conformado por el titular de la alcaldía, seis de sus integrantes de la planilla que serán representantes de una circunscripción y cuatro concejales provenientes de diversas fuerzas políticas.
Abundó que dicho órgano colegiado no tendrá facultades administrativas ni de gestión, sino que tendrá facultades de aprobación del proyecto de presupuesto que envía la alcaldía al gobierno de la Ciudad de México.
Explicó que por ahora las delegaciones tienen una sola fuente de financiamiento, que es la Secretaría de Finanzas, sin embargo, las alcaldías tendrán cuatro fuentes de financiamiento: el presupuesto que le autorice el gobierno central y los recursos autogenerados.
Además de los recursos federales etiquetados que puedan llegar a la alcaldía, como aquellos que puedan servir para inhibir el delito o para la infraestructura básica.
Las alcaldía también obtendrán recursos por el pago de servicios que pueda generar como servicios ambientales o culturales, recursos que se definirá en el cabildo integrado por los 16 alcaldes y el jefe de gobierno.
De esta manera, por ejemplo, las alcaldías como Xochimico, Cuajimalpa, Tlalpan y Milpa alta recibirán dinero por el suministro de agua a otras demarcaciones o bien Tláhuac recibirá un monto para la conmemoración del Día de Muertos.
Afirmó que será facultad del órgano colegiado dar seguimiento a las cuentas, para evitar mal uso del dinero, y que las alcaldías son el gobierno de primer contacto con la ciudadanía, de esta manera, los ciudadanos se podrán acercar de la misma manera que con las delegaciones para resolver sus necesidades.
Puntualizó que debido a la coexistencia de los gobiernos federales y locales en la Ciudad de México no se podrá otorgar la soberanía a la entidad, por lo que la capital seguirá siendo autónoma pero no soberana.
Por ello, dijo que las alcaldías deberán tener facultades equiparables a las que tienen los municipios pero sin serlo; además, tendrán concejales en lugar de regidores.
Respecto a las votaciones que tendrán lugar el próximo mes de julio, explicó que la ciudadanía votará por una planilla integrada por el titular, que compite por ser el alcalde, seis concejales por circunscripción y cuatro concejales por el régimen de plurinominalidad, es decir 10 en total.
Destacó que en este momento se vive un proceso de transición de régimen, motivo por el cual la Asamblea Constituyente decretó que de 2018 a 2021 la ciudad mantendrá el mismo número de circunscripciones, es decir 16 y será hasta después de 2021 cuando se contemple el incremento de alcaldías como en el caso del Centro Histórico.
Suárez del Real aseguró que las planillas deberán cumplir con una cuota de género, es decir, si la titular es mujer, el primer concejal tendrá que ser hombre o viceversa, en total deberá de tener 50 por ciento de hombres y 50 por ciento de mujeres, así como incluir a un joven y a un representante de un pueblo o barrio originario en caso de existir en la demarcación.
Afirmó que los partidos políticos tendrán la posibilidad de abrir sus planillas a la comunidad, no necesariamente tienen que ser militantes por lo que se abre la posibilidad a la asociación civil y a ciudadanos interesados a fin de mejorar la transparencia y la rendición de cuentas.
Fuente: Notimex
