Tras el terrible sismo que dañó la CDMX, el panorama político ya no es el mismo y, como en el Waze —que vía internet marca las rutas más convenientes para llegar a una dirección—, los partidos políticos tendrán que recalcular su ruta a 2018.
Antes de la tragedia en todos los partidos se habían fortalecido dirigentes y militantes “puros” para ocupar las principales candidaturas, entre ellas la importantísima gubernatura de la capital de la República.
Por una parte, Alejandra Barrales, con la tarea de amarrar un Frente Amplio del PRD con el PAN, el Movimiento Ciudadano y otras fuerzas políticas, se volvía a perfilar como la favorita para asumir la candidatura local.
Con ella se habían anotado importantes liderazgos territoriales del partido como el delegado en GAM, Víctor Hugo Lobo, y ya pocos hablaban de los “civiles” que están incrustados en el gobierno de Miguel Ángel Mancera.
Era un asunto de políticos y “de militancia”, no de advenedizos que buscaban aprovechar la oportunidad de colarse en la lista como Salomón Chertorivski, Armando Ahued y Manuel Granados, que aunque es militante del PRD, no lo consideran “puro”.
Por ahí se perfilaba el asunto, hasta que la tragedia le vino a dar un vuelco a la estrategia y ahora se tiene que repensar en un perfil más “ciudadano” para que sea aceptado por la sociedad civil, que se sintió abandonada por los partidos.
La carga política que antes del 19 de septiembre tenían algunos aspirantes se consideraba una ventaja, pues estaba claro que el Frente era un asunto de partidos; hoy, ya no es así la cosa.
Es donde personajes como Chertorivski o Ahued, con perfiles más ciudadanos, podrían encajar mejor entre los electores. Incluso el mismo Granados, que si aprovecha bien la asesoría legal a damnificados puede tomar un nuevo aire.
De todos ellos quizá Salomón sea el más indicado por su juventud y porque en la reconstrucción de la CDMX su secretaría —Economía— no tiene tantos encargos como sí los tendrán la de Salud y la Consejería Jurídica, cuyos titulares no se pueden alejar mucho.
Desgraciadamente, la tragedia traerá un desgaste fuerte a los aspirantes que son gobierno, pues casualmente las delegaciones Tlalpan y Cuauhtémoc registraron serias emergencias, y tanto Ricardo Monreal como Claudia Sheinbaum quedan muy acotados.
En una de esas hasta Morena tendrá que pensar en otra opción para la candidatura capitalina, pues de por sí Claudia venía de un serio desgaste público por la forma en que fue impuesta; ahora con su mediocre gobierno y pésimo control de daños, peor.
Quieran que no, el sismo del 19 también tiró las piezas del tablero electoral rumbo al año entrante.
CENTAVITOS… Todo el mundo tiene presente que a unas horas de que pasados los sismos y de que la sociedad se organizara en las tareas de salvamento, el senador “independiente” Alejandro Encinas se llenó la boca al exaltar la tarea de los jóvenes, señalando que esa es la fuerza de México y que deberían tener mayores oportunidades, incluso en la política. Qué bueno que Encinas haya dicho eso, porque la primera pregunta que tendría que contestar es si está dispuesto a retirarse para darle paso a los jóvenes, porque ya lleva un buen rato ocupando un lugar en la política y nada más no se ve para cuándo deje la silla, toda vez que es un veteranazo… Ah, y junto con él podrían seguirlo Lola Padierna, Layda Sansores, Manuel Bartlett y hasta Andrés Manuel López Obrador, que ya no se cuecen al primer hervor.
http://www.excelsior.com.mx/opinion/adrian-rueda/2017/09/28/1191210
