Por Gerardo Jiménez
Lo que Raymundo Collins sabe hacer muy bien es aplicar la mano dura y dar resultados. A unas horas de que había corrido por los pasillos del Ayuntamiento y de la SSP capitalina su confirmación como la propuesta para ser el relevo de Hiram Almeida Estrada, el todavía titular del Instituto de Vivienda ya se había reunido con mandos de la policía capitalina.
En ese encuentro, según reveló el propio Jefe de Gobierno José Ramón Amieva, sus principales objetivos consistirán en reforzar la presencia de la policía en las zonas de Polanco y la Roma-Condesa, dos corredores en los que la Unión Tepito maneja la distribución de droga y la extorsión a restaurantes, como fue admitido la semana pasada por el subsecretario de Operación Policial, Édgar Bautista Ángeles.
Desde el 26 de mayo de 2013, cuando 13 jóvenes de Tepito fueron secuestrados y asesinados, se supo que la Unión Tepito controlaba el corredor Roma-Condesa, y ahora va por la zona de Polanco, de acuerdo con varias denuncias que se están recabando a través del Consejo Ciudadano.
Es clara ya la guerra entre la Unión Tepito y la Anti Unión, y que por más operativos y despliegues, sobre todo de la Policía de Investigación, en los últimos años no ha podido concretar la captura del líder de este grupo delictivo, Roberto Moyado Esparza “El Betito”. Se espera que con Collins se logre a corto plazo, de ser aprobado por el Gobierno Federal.
Collins no es ajeno al tema del narcomenudeo y al ataque de grupos criminales, incluso ha sido amenazado de muerte; durante su titularidad en la Central de Abasto también controló la incidencia, pero hay quienes dicen que otros delitos crecieron como el secuestro y la venta de droga, pero que todo era controlado “desde muy arriba”.
El que sería el nuevo Jefe de la policía es gente cercana a Marcelo Ebrard: en el año 2000 fue nombrado subsecretario con indicativo Sagitario, creando un grupo de Fuerzas Especiales abocado al creciente delito de narcomenudeo.
El Grupo Sagitario fue creado en febrero de 2002, derivado del conocido como Álamo que trabajó bajo las órdenes de Leonel Godoy.
La característica de ambos era que actuaban vestidos de negro y a veces encapuchados para realizar operativos, principalmente en zonas conflictivas de la ciudad.
A la llegada de Ebrard a la SSP se les identificó como Fuerzas Especiales. De ahí, el entonces subsecretario de la dependencia, Raymundo Collins, creó el Grupo Sagitario, dedicado al combate al narcomenudeo. Este grupo llevó a cabo los mayores decomisos de droga, principalmente en casas del barrio de Tepito.
Collins dejó el cargo en mayo de 2003, y Sagitario se convirtió en Grupo Tigre, bajo las órdenes del nuevo subsecretario, Gabriel Regino.
En agosto de 2004, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal emitió la recomendación 06, dirigida a la SSP capitalina, por la acumulación de 79 quejas contra los elementos de las fuerzas especiales de la dependencia, entre el 6 de marzo de 2003 y el 30 de abril de 2004.
Las acusaciones documentadas fueron por ejercicio indebido del servicio público, lesiones, abuso sexual, allanamiento de morada y robo. Por ello, la SSP desintegró esos grupos y reasignó a sus elementos a distintas labores dentro de la corporación.
A pesar de estas acusaciones y presuntos vínculos con criminales, Collins se ha mantenido vigente y en posiciones políticas decorosas.
Hay quien dice que su trabajo será meter disciplina a la policía, pero no pocos dudan que sus acciones sean apegadas al uso debido de la fuerza.
Otros aseguran que será él quien controle la violencia y los ríos de sangre de tanta ejecución que todavía se da, mientras viene la transición para la llegada de Claudia Sheinbaum.
