A raíz de los hechos violentos del 14 de septiembre en Plaza Garibaldi, el sector del comercio establecido en el Centro Histórico de la Ciudad de México comenzó a levantar la voz para que directamente el Gobierno capitalino que encabeza, José Ramón Amieva y atienda sus demandas para frenar la ola de secuestros, extorsiones y cobro del derecho de piso, principalmente en el llamado perímetro B.
Los afectados comentan que los focos rojos están en Paraguay y Nicaragua.
“Ahí tienen dos células muy fuertes, realmente no sabemos dónde sea el centro real de operación de la Unión, pero tienen esas dos calles como tenían Eje 1 Norte y Brasil, donde tenían antes la cueva, donde llevaban a los secuestrados y ahí los bodegueaban”, dijo uno de los representantes de locatarios, quien pidió el anonimato por seguridad personal.
En los días pasados solicitaron reunirse con el doctor Amieva a quien han enviado mensajes a su teléfono celular, pero, aseguran, los canaliza con el director jurídico y no hay repuesta.
Por el contrario, sus quejas han tenido eco en el gobierno federal, principalmente con la Policía Federal y la Secretaría de Marina, la primera dependencia les ha señalado que llevan a cabo trabajos de inteligencia desde marzo.
Sólo se espera la aprobación del gobierno capitalino para enfrentar a estos delincuentes que han hecho suya la zona y que incluso, calles completas, las han convertido en centro de operación del crimen.
Mientras que las autoridades judiciales tratan de minimizar el hecho y aseguran haber detectado la operación de grupos de imitadores del Cártel de la Unión de Tepito en el Centro Histórico de la Ciudad de México, de tres a cuatro denuncias por semana recibe la Fiscalía Antisecuestro de la Procuraduría capitalina.
El Fiscal Especial de Investigación para la Atención del Delito de Secuestro Denominada Fuerza Antisecuestro (FAS) de la Procuraduría Capitalina, Willy Zúñiga Castillo informó sobre este modus operandi en el que grupos delictivos se aprovechan del miedo que el nombre “La Unión de Tepito” genera para intimidar a los empresarios.
“Es el grupo que ahorita está mencionándose mucho, es el que nosotros tenemos muy latente, las denuncias que hemos tenido en años anteriores, han sido de otros y según el grupo criminal que esté sonando más, es la identidad que asumen para obtener lucro”, abundó el Fiscal de la Fuerza Antisecuestro.
Aunque muy pocos caen, dijo que este grupo delictivo ha elevado las denuncias por extorsión en las delegaciones Cuauhtémoc y Venustiano Carranza.
Sin embargo, en las capturas que han realizado, se ha comprobado que los detenidos no tienen relación alguna con el Cártel de Tepito y sólo aprovechan el miedo que la pugna entre las mafias locales se vive en el corazón de la ciudad.
El Consejo Ciudadano de la CDMX dio a conocer que los reportes por extorsiones telefónicas casi se duplicaron en este sexenio, con un aumento del 90%.
De 77 mil reportes de enero a agosto de 2012, pasó a 148 mil, en el mismo periodo de 2018; 4 de cada 10 personas que reciben una de esas llamadas tiene de 31 a 45 años y 10% son mayores de 60 años.
El 61% de los intentos se siguen realizando a teléfonos fijos y el 45% paga con depósitos, principalmente en tiendas.
La zona metropolitana concentra más del 60% por ciento de las denuncias.
Por lo que se refiere al modus operandi, en este sexenio, están en primer lugar los secuestros virtuales, perpetrados supuestamente contra los hijos.
Esta administración concluirá con la percepción de la inseguridad a la alza, a pesar de sus esfuerzos; los homicidios dolosos y las extorsiones suben y habrá que ver más allá de la voluntad que tenga Claudia Sheinbaum para enfrentar estos males, el gabinete de seguridad que logra conformar.
