Patricia Sotelo / Foto: Claroscuro
Algo huele mal en el caso de la supuesta detención de la directora del Colegio Enrique Rébsamen, Mónica García Villegas. Y digo supuesta, porque el abogado que la representaba, Javier Coello Trejo, aseguró que se trató de una entrega pactada.
La relatoría de los hechos ofrecida por la procuradora capitalina Ernestina Godoy no concuerda con la versión de quien defendió a la maestra hasta el día en que fue capturada y encarcelada en el penal femenil de Santa Martha Acatitla. El choque de versiones abre la sospecha sobre un posible montaje.
De acuerdo con la versión oficial, “Miss Mónica”, también propietaria del colegio donde murieron 19 niños y siete adultos tras derrumbarse en el terremoto del 19 de septiembre de 2017, fue detenida en la mañana del sábado 11 de mayo en un restaurante de la calzada Tlalpan, en la Ciudad de México, que después se sabría se trataba de un Toks, por agentes de la Policía de Investigación que llegaron a ese lugar tras recibir una denuncia anónima.
Para dar los detalles de la captura, la procuradora ofreció una conferencia de prensa en la que extrañamente se encontraba la secretaria de Gobierno de la CDMX, Rosa Icela Rodríguez, cuando ésta no suele estar en esos actos.
Se filtró una imagen donde supuestamente se ve a “Miss Mónica” con su padre entrando al restaurante, pero no se observa el momento de su detención. Las autoridades detallaron que en el video también se podía identificar a policías vestidos de civil y señalaron que la detención se dio en forma discreta, sacando a la detenida por la puerta trasera del inmueble.
Sin embargo, el abogado Javier Coello Trejo tiene otra versión. Dijo que tras su “captura”, la maestra le había llamado momentos antes para decirle que se entregaría nada más ni nada menos que en el Palacio de Gobierno capitalino, y que él trató de disuadirla.
Después, el periodista Ciro Gómez Leyva dio a conocer en su noticiero de televisión las conversaciones vía WhatsApp que tuvo el abogado con la cuñada de “Miss Mónica”, Talía Nieto, tanto la noche antes de la detención como momentos después de la misma, que revelaban la negociación para su entrega entre el medio hermano de la maestra, Enrique García, y la secretaria de gobierno, un subsecretario y un diputado local, que el periodista identificó como Rigoberto Salgado, ex alcalde de Tláhuac.
Según la conversación con la esposa de Enrique García, la maestra había aceptado esta negociación, a la cual se opuso el abogado al percibir que Mónica García o sus familiares buscaban recibir los 5 millones de pesos que el gobierno capitalino había ofrecido por su captura desde el 30 de abril, por lo que decidió dejar de defenderla legalmente.
La jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheimbaum, negó rotundamente que se haya dado una negociación. Sin embargo, prevalecen las dudas.
¿Por qué estaba la secretaria de Gobierno, Rosa Icela Rodríguez, en la conferencia de prensa de la procuradora, cuando se trata de un caso judicial, no político?
Además, el abogado Coello aseguró que en el video del restaurante aparece también el hermano de la maestra, lo cual no informó la PGJ. La “captura” fue en el Toks, según se dijo, aunque el jurista sostuvo que la directora del Rébsamen se entregó en el edificio donde despacha Sheinbaum, lo cual también se revela en la conversación del WhatsApp.
Asimismo, ha trascendido que la recompensa de los 5 millones de pesos serán entregados al medio hermano de Mónica García. ¿La traicionó o negoció en nombre de su hermana?
Encarcelar a personajes odiados por la sociedad eleva la popularidad de cualquier autoridad. Lo hemos visto con varios casos. Para Claudia Sheinbaum, la detención de la dueña del Colegio Rébsamen representa una medalla que le da legitimidad a su gobierno.
Sin embargo, las autoridades capitalinas no han sido transparentes en este caso. Sería lamentable que estemos presenciando la nueva versión de un montaje tipo Florance Cassez en plena Cuarta Transformación.
