Fernando Díaz Naranjo
Hoy más que nunca la transparencia, el acceso a la información pública y la rendición de cuentas son pilares en nuestro sistema democrático y más en una Ciudad como la nuestra que ha luchado por conseguir dichos derechos. Estos rubros son garantes de una mejor gobernabilidad y genera un contrapeso social entre la labor ejercida por la administración pública y la sociedad.
Por ello resultó muy interesante algunos datos proporcionados en el Informe de Actividades y Resultados 2018 que el presidente del Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales y Rendición de Cuentas de la Ciudad de México, Julio César Bonilla Gutiérrez, rindiera ante los diputados locales en días pasados.
Entre los datos más significativos de dicho informe que registra información del ejercicio 2018, resaltamos con los siguientes:
- Los 146 sujetos obligados de la Ciudad de México recibieron 147 mil 671 solicitudes de información pública a través del sistema INFOMEX, TEL-INFO y de las unidades de transparencia respectivas. De estas solicitudes poco más de 124 mil, se dirigieron al poder ejecutivo de nuestra Ciudad Capital, siguiéndole la administración pública central con casi 53 mil solicitudes; las ahora alcaldías con más de 38 mil solicitudes, y los órganos desconcentrados y paraestatales con más de 32 mil solicitudes.
Este apartado, que registra la mayor demanda, en 2017 registro un nivel de aceptación “bueno” de parte de la población (82%)
- 3 mil 228 recursos de revisión fueron presentados en razón de que las personas que solicitaron información consideraron que las respuestas no cumplieron con lo requerido.Es importante referir que poco más de 3 mil de estos recursos fueron atraídos y resueltos por el INAI.
- Sobre el ejercicio de los derechos ARCO se registraron más de 7 mil solicitudes. Hay que recordar que, a través de estos derechos, los ciudadanos pueden proteger sus datos personales en posesión de organismos públicos, así como conocer el uso que se hará con ello.
Tan sólo estos datos nos permiten ver que el acceso a la información se ha posicionado en la población como un referente de especializado para adquirir información y con ello contar con mayores elementos de juicio sobre diversos temas de interés público.
El periodismo, por ejemplo, en sus ejercicios de investigación ha publicado grandes resultados a través de solicitudes de información y con esto devela verdades, conocemos procesos y emitimos nuestra opinión sobre sucesos.
Pero hay que decir que todos los tópicos relacionados con la transparencia son relativamente nuevos, muchos aún en construcción, pero no cabe duda que han permitido a académicos, investigadores, periodistas y a la población en general, contar con información para diversos análisis. muchos de los cuales inclusive son publicados en diversos medios de comunicación y, por lo mismo, constituyen un contrapeso importante entre el quehacer de la administración pública y el derecho a saber de la población.
Por ello, la transparencia debe ser considerado como un indicador de buen gobierno, es decir, entre mayor transparencia y rendición de cuentas, una administración muestra que su ejercicio está acorde no solo con la normatividad aplicable, sino va de la mano con la sociedad.
