Gerardo Jiménez
Poco a poco se destapó la denuncia de los desalojos violentos que llevan a cabo grupos del crimen organizado principalmente en el Centro Histórico de la ciudad, otro delito que operan carteles como la Unión Tepito, la Anti Unión y en alcaides del surponiente como Tláhuac y Xochimilco, otros delincuentes como Los Rodolfos.
Hace algunas semanas en este espacio comentamos que la autoridad del Centro Histórico informó que hay un registro de 20 casos de despojo en los perímetros A y B, de esta cifra un 20% están relacionados con actividades o grupos delictivos, de acuerdo con su titular Dunia Ludlow.
“Tenemos un análisis no tan profundo. Lo tenemos distinguido en que sí el despojo, vino por una orden judicial o se respetó algún tipo de procedimiento administrativo, si simplemente fue por grupos de coacción, cuando hay ciertos vínculos o se dice que tiene que ver con el crimen organizado, pero es una análisis que nosotros mismos hicimos… Yo te diría como un 20% por ciento que están asociados con los fenómenos delincuenciales que hay de la zona”, dijo Ludlow, después de encabezar las Jornadas de Patrimonio Seguro en el Centro Histórico.
La semana pasada, la Procuraduría General de Justicia (PGJ) informó que tiene previsto recuperar al menos 15 predios que fueron invadidos de manera violenta por grupos de personas que portaban armas largas, según dijo la subprocuradora de averiguaciones previas desconcentradas, Margarita Vázquez.
“Tenemos 10 predios recuperados los cuales son despojos con violencia, se han entregado en posesión a sus dueños originales y estamos en investigación más concreta sobre otros 15… “Estamos integrando otros 15, yo calculo que en unos 15 días a más tardar un mes estaremos entregando a sus legítimos poseedores”, dijo la funcionaria.
Explicó además que están investigando el modus operandi en el que entran hombres armados a despojar a los propietarios de sus inmuebles.
A su vez, la procuradora Ernestina Godoy explicó que en algunos de los sitios que se han recuperado únicamente encuentran a los veladores por lo que algunos de ellos fueron detenidos. En este sentido, mencionó que se está investigando si alguien está avisando a los grupos delictivos sobre la intervención de la PGJ.
Incluso, los predios que han sido recuperados, de acuerdo con Godoy, no se entregan de manera inmediata por temor a que los grupos criminales puedan tomar represalias contra sus legítimos dueños.
Ejemplo de estos casos ha quedado de manifiesto en calles como San Jerónimo o Regina en el Centro Histórico donde locales han sido prácticamente robados y en otros al tratar de recuperarlos, los agresores cuenta con todo un aparato jurídico y de intimidación para que los propietarios desistan en su demanda.
Se ha difundido desde principios de año que la Unión de Tepito ha recurrido a las amenazas de muerte y uso de violencia para desincentivar la denuncia de víctimas que han sido despojadas de predios e inmuebles, revelaron vecinos y comerciantes de las colonias Roma, Guerrero, Centro, Peralvillo, Morelos y Centro.
Grupos criminales se encuentran en posesión de propiedades como Manuel Doblado número 85 y Pedro Moreno 76; además de los que se encuentran en calle Sol números 74, 91, 94, 98 y 106; Lázaro Cárdenas 202; Camelia 94; Lerdo 116, todos en la colonia Guerrero.
El de Ferrocarril de cintura 170, colonia Morelos; Peña y Peña 63, 68 y 75; República de Costa Rica 163; República de Chile 46; en calle Calvario, colonia Tepeyac Insurgentes, alcaldía de Gustavo A. Madero.
Ha quedado de manifiesto, conforme a las declaraciones que han hecho autoridades locales como el Jefe de la policía capitalina, que grupos delictivos son quienes operan estos locales.
Orta ha ido más allá, reconoció que mandos medios, Jefes de Región y hasta subsecretarios han protegido a estos núcleos criminales, principalmente de la Unión Tepito.
Las autoridades judiciales también han detallado sobre este fenómeno que han sido recuperados predios en Xochimilco, Benito Juárez y en Cuauhtémoc. La estrategia en las próximas semanas se enfocará en el centro de la capital, donde este delito está por desbordarse.
