Gerardo Jiménez
En la Ciudad de México se ha denunciado a la venta ilegal de balas, sobre todo, las que se comercian en un mercado negro que se da principalmente a través de la propia Secretaria de Seguridad Ciudadana.
Se ha hecho público que una caja nueva de cartuchos calibre .9 milímetros tiene 50 balas, la cual tiene un precio en el mercado negro de 500 pesos, esto quiere decir que una sola bala, con la que una persona puede ser asesinada, tiene un costo en la clandestinidad de diez pesos, revelaron fuentes consultadas de la SSC capitalina. A la semana pueden venderse 10 mil balas de manera ilegal.
No obstante, aunque parezca a increíble, de manera formal a través de la Secretaria de la Defensa Nacional, pueden ofertar de manera legal más de 53 mil balas calibre .9 milímetros hasta en siete pesos cada munición.
De acuerdo con el listado del 9 de mayo pasado, al cual se tuvo acceso, esta comercialización se da a través de la Dirección General de Industria Militar y la Dirección de Comercialización de Armamento y Municiones.
En su listado del 9 de mayo, se tenía en existencia un total de 53 mil 641 cartuchos de este calibre en existencia.
Los costos para adquirir estas balas van de moneda nacional (pesos), dólares y euros, según la marca de las municiones. Así mismo hay lotes de 5 mil municiones hay otros de 350 balas, de acuerdo con la lista consultada.
Por ejemplo, el lote de 5 mil cartuchos de la marca Cascada de Ammo de punta redonda y encamisada, que tiene un costo de 7 mil 93.4 pesos por cada millar de municiones, abarcaría un total de 35 mil 467 pesos, lo que daría un costo promedio de 7 pesos con IVA por cada bala adquirida.
Dentro de las importadas se encuentra la calibre .9 milímetros Luger marca CCI-Speer Laman T.M.J con un lote de 4 mil 100 municiones, con un costo con IVA de 389.38 dólares (7 mil 359 pesos) por cada mil cartuchos, lo que daría un total de 30 mil 173 pesos, por cada bala s estarían pagando 7 pesos con 35 centavos.
Como se ha dicho, esto contrasta con el comercio ilegal de municiones, ya que una sola bala, con la que una persona puede ser asesinada, tiene un costo en la clandestinidad de diez pesos.
Para que el negocio de venta clandestina de balas, que principalmente provienen de los stands de tiro de la policía capitalina, sea rentable, las municiones son vendidas por “paquete”, cada uno de los cuales está integrado por 20 cajas de balas.
En promedio, cada semana se estarán comercializando de manera ilegal 10 mil cartuchos calibre .9 milímetros.
La Secretaría de la Defensa Nacional tiene fijados como requisitos para la compra de cartuchos: la fotocopia del registro del arma, así como otra fotocopia de la Cartilla del Sistema Militar Nacional (SNM) liberada, o si son mayores de 40 años, la hoja de excepción del S.M.N. (expedida en la Oficina de Reclutamiento de las zonas militares del país o en la Oficina Central de Reclutamiento en la Ciudad de México); para personal femenino, fotocopia del acta de nacimiento. En caso de ser extranjero, forma migratoria FM2 o la Carta de Naturalización.
También una copia del comprobante de domicilio (boleta de pago de predio, recibo de agua, luz o teléfono) actual. Fotocopia de identificación con fotografía (Credencial de Elector, Licencia de Conducir, Pasaporte) actual y legible.
Además de fotocopia del acta de nacimiento, (Nombre (s) y apellidos deberán coincidir con todos los demás documentos; otra fotocopia de la Clave Única de Registro de Población (CURP).
Y en caso de que los cartuchos sean solicitados para tiro o cacería deberá anexar fotocopia de la credencial del club cinegético al que pertenece, indicando día, mes y año del inicio y término de la vigencia, la cual no debe ser mayor de dos años.
Entre la legalidad y la clandestinidad, las calles de esta Ciudad de México están llenas de armas, pero sobre todo de balas, las cuales llueven de manera literal, en zonas como Iztapalapa, donde nos seguimos enterando de historias como la de Megan, una niña de seis años, que hace unos días perdió un ojo, nuevamente, por una bala perdida.
