Por La Mafia en el Poder
Ahí en el Zócalo, donde está la sede del gobierno de Miguel Ángel Mancera andan muy de buenas porque les salió una jugada de doble banda con la bronca que traen con la Línea 7 del Metrobús.
Por un lado está el tiro preciso que parece que lograrán desde la Consejería Jurídica a cargo de Manuel Granados, y con el cual esperan que hoy viernes, o a más tardar el lunes, puedan los ingenieros de Obras y Servicios terminar lo que dejaron a medio construir en el Paseo de la Reforma.
Y está bien, porque eso de dejar las cosas a medias nunca ha sido bueno, y menos, dicen, porque se corre el riesgo de que se presenten desperfectos en infraestructura que ni siquiera habían contemplado intervenir y todo por causa del agua que se está infiltrando en las zonas inconclusas.
Y precisamente de la Secretaría de Obras y Servicios es que les salió el rebote a la otra banda, pues por fin lograron tener la autorización completa al proyecto de la Línea 7 del Metrobús.
Aunque más que cacarearlo, debería de darles un poquito de pena porque eso de obtener una autorización a una obra como la Línea 7 cuando ya se tiene un 40 por ciento de avance, como que manda una señal no muy buena de cómo hacen las cosas los inges de Edgar Tungüí, el secretario de las construcciones.
Pero el asunto es que ya tienen permiso del INAH y firmado por Arturo Balandrano Campos, coordinador nacional de Monumentos Históricos, y aunque con algunas modificaciones, parece que por ese lado ya no tendrían porqué tener más problemas.
Todos dirían que los astros se alinean a favor de los encargados de sacar adelante ese corredor de transporte, sin embargo, todavía no deberían bajar la guardia.
Y en la otra esquinaaa…
Con tanta información durante la semana, casi nadie se acordó que todavía hay varios comités vecinales, particularmente en la delegación Miguel Hidalgo, que no han tirado la toalla ni piensan hacerlo para que el metrobús no pase por Reforma.
Desde hace casi un mes, y antes de que la Academia Mexicana de Derecho Ambiental ganara el amparo que interpuso, ya estaban preparando no una, sino varias de estas figuras jurídicas de protección para detener los trabajos.
Y precisamente hoy saldrán de nuevo a levantar la voz, van a tundir la autorización del INAH, hablarán sobre el amparo de la Academia Mexicana de Derecho Ambiental, y también del tipo de vehículos que quiere meter el Sistema Metrobús para la Línea 7, que consideran, son contaminantes lo que le sigue.
Así que los problemas todavía no acaban para esta controvertida obra, eso por parte de las protestas, porque todavía tiene otros aspectos que no han quedado resueltos, y que no saben cómo darles salida, como el caso de la ciclovía que se supone, tendría que acompañar el trazo del metrobús en el tramo de Lieja a Periférico.
Y sobre eso, Tanya Müller, la secretaria de los árboles, no ha querido que ni se lo recuerden, porque ese es otro trabuco que no se ve por dónde pueda deshacer.
*El Irreverente publica de lunes a viernes.
