Ante la próxima llegada de sus peores enemigos al poder, Miguel Ángel Mancera y su grupo cercano preparan a marchas forzadas la salida de un diario, que estaría bajo la dirección del periodista Rubén Cortés Fernández, ex director de La Razón de México.
El 25 de junio, justamente una semana antes de las elecciones constitucionales, Cortés Fernández dejó la dirección del diario al que sirvió durante nueve años. La versión oficial fue que renunció “por así convenir a sus intereses”.
La versión real es que los dueños del rotativo leyeron con claridad que el triunfo de Andrés Manuel López Obrador iba ser arrollador, y ofrecieron la cabeza del periodista de origen cubano para apaciguar un poco la ira de los futuros gobernantes.
Y es que La Razón se caracterizó por ser enemigo acérrimo de AMLO y como el dueño, el tamaulipeco Ramiro Garza Cantú, tiene varios negocios y contratos con el gobierno federal, decidió modificar su línea editorial.
Ante ello Cortés Fernández comentó entre varias personas que en realidad había sido echado de la dirección del diario por presiones de un grupo de pejistas, que nunca estuvieron cómodos con la publicación.
Esa indiscreción no cayó nada bien entre algunos dueños de medios.
El periodista inició acercamientos con varios medios para colocar su columna de opinión, pero las puertas se le fueron cerrando una a una, y lo más cerca que estuvo de volver a la actividad fue en el diario 24 Horas, donde el 27 de junio sostuvo algunas pláticas pero al final no se concretó nada.
A la par de esas conversaciones con directivos del matutino, el periodista inició también pláticas con personajes importantes del gobierno de Miguel Ángel Mancera para ver la posibilidad de sacar a la luz un matutino.
La idea fue cobrando fuerza y, aunque en no apareció oficialmente el nombre de Mancera, la cercanía de quienes organizaron los contactos y revisan los avances, dejan en evidencia de dónde viene la idea.
El proyecto va tan en serio que incluso se planea que salga en los primeros días de septiembre, a fin de empatarlo con la instalación del próximo Congreso de la Unión y del primer Congreso de la Ciudad de México.
Quienes están cerca del proyecto comentan que la idea de sacar un diario es para utilizarlo como una especie de dique ante los ataques que se esperan por parte del futuro gobierno, ya que Mancera y sus cercanos alimentaron una rivalidad muy fuerte.
Del lado de los obradoristas hay un gran sentimiento de revancha, sobre todo porque consideran que los manceristas no solamente los traicionaron, sino que se metieron con sus familias y eso no lo podrán perdonar.
Se habla incluso de que algunas personas intentaron ya tender puentes con los pejistas, sobre todo con Marcelo Ebrard, próximo canciller de México, pero que las puertas a la negociación están cerradas, por lo que el diario va para adelante.
Se sabe que el diseño editorial está muy avanzado y que se analiza la corrida financiera para el sostenimiento del rotativo, pues se piensa contratar a gente experimentada para garantizar la calidad del mismo.
Incluso en la sede de La Razón es un secreto a voces que Cortés Fernández ya habló con algunas personas que durante años integraron su equipo –y que continúan ahí- para decirles que estén pendientes a su llamado, aunque muchos tienen dudas.
El nombre del periódico será –muy probablemente- “En Concreto” y tendrá como caja de resonancia alrededor de 30 portales en el país, que difundirán sus principales temas para ampliar su alcance.
En la actualidad existe una página web llamada “Las Noticias en Concreto”, que se supone será la base para la integración de su plataforma digital, y que lleva ya algunos meses al aire.
La existencia del proyecto es un secreto a voces, pues incluso en algunos círculos empresariales y políticos ya se empieza a hablar del próximo “periódico de Mancera”.
Si el diario llega a ver la luz, será utilizado para frenar ataques en contra de quienes integraron el primer círculo del ex Jefe de Gobierno, y para mandar mensajes a sus enemigos visibles, pues los patrocinadores cuentan con información y expedientes.
Se dice que esta nueva publicación podría convertirse en algo así como la nueva Jornada, que durante años se caracterizó por ser crítica del gobierno y defensora de las causas sindicales y de organizaciones civiles.
Además de su conformación editorial, muy interesante será ver qué plumas se integran a sus páginas, pues hay muchos columnistas y analistas que no son bien vistos por el futuro régimen y seguramente buscarán dónde refugiarse también.
En las últimas semanas ha habido una fuerte crítica por parte de algunos editorialistas hacia las políticas anunciadas por AMLO, lo que ha desatado el enojo de más de un integrante del grupo cercano al tabasqueño.
Incluso algunos periodistas han denunciado acoso proveniente se simpatizantes del futuro Presidente de México, lo cual ha vuelto tirante la relación entre periodistas y parte del equipo obradorista, y eso que aún no asumen formalmente el poder.
Otra señal de que la relación con la prensa no será de lo más fluida, es el control absoluto propuesto para el equipo de transición para que un solo hombre concentre todas las áreas de comunicación de las dependencias del futuro Gobierno.
Esa tarea recaerá en César Yáñez, quien desde hace casi 20 años ha sido el vocero de Andrés Manuel y quizá su hombre más cercano, con el que comparte incluso asuntos de índole personal. Por esta y muchas cosas, la salida del periódico de Mancera ya despierta más de un comentario. No falta mucho para que salga y se vea de qué está hecho.
