POR: ELENA CHÁVEZ GONZÁLEZ
Tláhuac puede ser el reflejo de lo que sucederá en la CDMX si Morena gana la elección del primero de julio.
Una manta con el logotipo del partido de Andrés Manuel López Obrador sobresale en una vivienda de la calle Agustín Romero, donde vive “El Grillo”, temido entre quienes lo conocen por ser miembro del Cártel de Tláhuac, que no ha sido desarticulado en su totalidad. Este personaje mantiene la operación de bicitaxis que reparten la droga a sus operadores en otras demarcaciones también gobernadas por Morena.
A plena luz del día, en las calles donde fue abatido el líder del cártel de Tláhuac, Felipe de Jesús Pérez, alías “El Ojos”, se mueve un hombre que dice ser su pupilo: se trata de “El Grillo” que, aseguran los habitantes de la zona, cuenta con el respaldo del delegado sustituto, Arturo Medilla Padilla, para no ser molestado.
Nadie conoce su nombre de pila, sólo saben que se apellida Pérez y que le gusta lo llamen por su apodo. Fiel seguidor de “El Ojos” hasta el día de su muerte, este hombre de estatura baja, complexión mediana y piel morena, mantiene en el temor a las familias que viven cerca de su entorno, al cerrar calles con microbuses de su propiedad convirtiéndolas en cantinas al aire libre, donde vende alcohol y distribuye droga a adolescentes para que la entreguen
en colonias de la delegación y fuera de ella, principalmente en Xochimilco y Tlalpan.
“El Grillo” se ostenta desde hace meses como líder del Cártel de Tláhuac en la colonia la Conchita Zapotitlán sin que nadie, muchos menos el delegado en turno se dé cuenta de su existencia, ya que siendo director Jurídico y de Gobierno en la administración del morenista Rigoberto Salgado, era quien, junto con el Jefe de Unidad de Transporte y Vialidad, hoy candidato de Morena a la alcaldía, Raymundo Martínez Vite, garantizaba que los integrantes del Cártel de Tláhuac pudieran movilizarse libremente en la delegación más pobre de la Ciudad de México.
Tláhuac, dicen sus moradores, será el reflejo de cómo será la Ciudad de México si gana el Movimiento de Regeneración Nacional, por lo que están construyendo, desde abajo y en silencio, grupos de autodefensa para protegerse de los cárteles que las autoridades capitalinas y federales insisten en calificar como “banditas” de narcomenudeo, a pesar de las ejecuciones de los últimos días en Iztapalapa, donde, según el propio Jefe de Gobierno, fueron integrantes del Cártel de Tláhuac y de “Los Rodolfos”, de Xochimilco, quienes asesinaron a cuatro jóvenes.
¿De qué tamaño será la protección que tiene “El Grillo” que la Ruta 50 del microbús que va de Acoxpa a La Conchita
desvió su camino una cuadra porque este señor la cerró con sus unidades?
La indignación y el miedo son sentimientos que invaden a la población, que se siente vulnerable e indefensa ante la aparición de bandas delincuenciales, además de las ya existentes, como la “Mara Salvatrucha” que identifican perfectamente por la cantidad de tatuajes en cabeza, cuello, brazos y piernas. Los habitantes piensan organizarse para ejercer justicia por propia mano.
El temor se incrementa por el ambiente político-electoral que invade las colonias para la próxima alcaldía de Tláhuac, donde vecinos son presionados por los candidatos cercanos a Rigoberto Salgado que lo anuncian como diputado al Congreso local y operador de Claudia Sheinbaum y Andrés Manuel López Obrador, aspirantes a la Jefatura de Gobierno y Presidencia de la República, respectivamente.
Tláhuac puede convertirse en un foco rojo de intensidad incontrolable si las autoridades delegacional, estatal y federal no dejan de jugar al “gato y al ratón” y protegen a sus habitantes que viven temerosos ante lo que sucedería durante y después de la elección del domingo primero de julio.
@88ElenaChavez
