Por la Mafia del Poder
Bien dice que el dicho que en río revuelto, ganancia de pescadores.
Y eso es más o menos lo que está pasando en el PRD capitalino, que ante la indefinición sobre sus candidatos, ya cualquiera levanta la mano para proponer a quienes se les pegue la gana.
Así pasó con Enrique Vargas, secretario general de ornato del sol azteca capitalino, quien se aventó la puntada de proponer a la senadora Dolores Padierna como abanderada amarilla al gobierno de le CDMX en 2018.
No es que Padierna carezca de méritos; al contrario, es una mujer preparada, luchadora social y fundadora del PRD, lo cual la hace valiosa, por supuesto.
El gran problema es quien la propone, pues Vargas está completamente desactivado al interior del partido y es identificado con René Bejarano y la propia Padierna, por lo que sus palabras carecen de validez.
A lo mejor el nace del corazón que sea la senadora, pero sus orígenes lo desacreditan. Sobre todo porque la corriente IDN, a la que pertenecen los tres mencionados, no pasa por su mejor momento.
Y desde luego está el nombre de Bejarano, que desgraciadamente le pesará toda la vida a Lola.
Las tribus ni se mosquean
Y en más sobre la propuesta de Vargas para que Padierna sea la candidata en la CDMX, las tribus perredistas ni se mosquearon.
Es más, ni siquiera hubo risas.
Una propuesta en este sentido no puede ser seria porque si por un milagro del señor se presentara en el Consejo Nacional, ninguna corriente la apoyaría.
Ya se imaginan todos a Lola en la silla del gobierno y a su marido operando los negocios.
Además Vargas representa –lo mismo que René y Dolores– el símbolo de las parejas imperiales en la política, pues no hay que olvidar que tanto Enrique como su esposa Laura Velázquez se turnaron la delegación Azcapotzalco de manera consecutiva.
Incluso Laurita se anotó como contendiente al Gobierno del DF en 2012, y fue bajada a cambio de lagunas cosas que al final ni le cumplieron.
Incluso en sus redes sociales es más activista de Morena que del PRD, pues se la pasa elogiando a Andrés Manuel López Obrador como la esperanza de México, en lugar de Miguel Ángel Mancera, que en términos prácticos debiera ser la bandera de los amarillos.
Santana sigue firme
El que sigue con todo dentro del PRD es el diputado federal Arturo Santana, a quien varios actores de su partido han ubicado en las filas de Morena.
El legislador, con varios años de trabajo en Iztapalapa, asegura que de ninguna manera se pasará al partido de El Peje y que él sigue firme con los perredistas, aunque algunos de sus dirigentes lo hayan maltratado.
Quizá se refiera al hielo que le tiró la delegada Dione Anguiano, quien decidió quedarse con todo el territorio de Iztapalapa y no compartirle a nadie.
Pero a pesar de ello se quedará y dará la pela por seguir activo.
Él sospecha que alguien con influencia en la dirigencia perredista quiere crearle mal ambiente para bajarlo de las listas de candidatos amarillos a diputados locales en 2018, pero que no será tan fácil.
Como quiera que sea el PRD tiene que acelerar ya sus definiciones si no quieren que se le empiecen a desbocar sus caballos.
*El Irreverente publica de lunes a viernes.
